Sé que podía haber ido tras ella. Aún no se había marchado, pero teníamos tantos problemas, arrastrábamos tanto pasado, que era imposible que se solucionase como en una de esas películas de cine (...)
No serviría de nada y yo lo sabía. Ella necesitaba que le dijese otras cosas que yo no podía decir en aquel momento.
Y es que hay veces que una pareja arrastra tanto, que ni el amor es suficiente. Ni el amor es suficiente.
Y, con el tiempo, relees, resientes, vuelves a intentar comprender todo aquello que sentiste una vez y que tanto te dolió. En ocasiones, confirmas lo vivido.

No hay comentarios:
Publicar un comentario